En México, el tema del cannabis medicinal ha cobrado relevancia en los últimos años, marcando un avance significativo en el ámbito farmacéutico y terapéutico.
En este artículo hablaremos sobre el cannabis en las farmacias de México y analizaremos su historia y regulación.
Desde tiempos milenarios, el cannabis ha sido empleado medicinalmente por diversas culturas para aliviar malestares como la gota, el reumatismo, el síndrome premenstrual, el dolor y para tratar infecciones como la malaria. En registros que se remontan al año 2900 a.C., se documenta su uso como anticonvulsionante en Asia.
A lo largo del tiempo, el cannabis sufrió un declive en su percepción debido a la creencia generalizada de su impacto negativo en la sociedad. Sin embargo, en 1839, el médico irlandés William B. O’Shaughnessy, pionero en la investigación del CBD, destacó sus propiedades terapéuticas y su potencial como analgésico.
El descubrimiento del cannabidiol (CBD) se atribuye a Roger Adams en 1940, un químico graduado de Harvard. Mediante experimentos, Adams logró identificar y aislar el CBD y el CBN (cannabinol) de la planta de cáñamo. En paralelo, planteó la hipótesis de la existencia de un compuesto psicoactivo en la planta, el THC o tetrahidrocannabinol.
Fue en 1964, cuando el químico Raphael Mechoulam, en Israel, realizó nuevos experimentos que permitieron identificar la estructura del CBD. Al año siguiente, en 1965, Mechoulam logró aislar el THC, lo que confirmó que era este compuesto el responsable de los efectos psicoactivos del cannabis, no el CBD. Esto significó un avance crucial al demostrar la seguridad y los beneficios terapéuticos del CBD sin provocar efectos intoxicantes en la persona.
La planta de cannabis es de tamaño medio a alto y tiene una floración anual. Se originó en Mongolia y la zona sur de Siberia, siendo una planta dioica con plantas macho (polen) y plantas hembra (óvulos). Originalmente, se conocían dos subtipos: cannabis sativa (marihuana) y cannabis sativa L. (cáñamo), ambos ampliamente utilizados en la antigüedad.
Hoy en día, se sugieren tres subespecies debido a sus características físicas y efectos:
En 2006 se propuso una nueva clasificación del cannabis basada en propiedades de ADN en cada subespecie:
| Término anterior | Nuevo término | Contenido |
| Sativa | Indica | Alto contenido de THC |
| Indica | Afganica | Contenido equilibrado de THC y CBD |
| Ruderalis | Sativa | Uso industrial. Bajo contenido de THC comparado con CBD |
El panorama legal del cannabis varía significativamente en América. Algunos países, como Uruguay, han legalizado su uso recreativo y medicinal, mientras que otros, como Estados Unidos, han adoptado regulaciones específicas a nivel estatal.
En Uruguay, la legalización del cannabis para uso recreativo fue pionera en América Latina, generando cambios significativos en la industria y el mercado. En ese entonces, las ventas fueron tan elevadas que las farmacias tuvieron que cerrar e incluso poner candados a algunos productos para controlar la demanda.
A continuación, te compartimos un mapa de la CNN que nos aclara un poco el panorama:
En 2017, México dio un paso importante al legalizar el cannabis medicinal, seguido por la publicación de un reglamento en 2018 que estableció las bases para la producción, investigación y uso terapéutico de productos cannábicos. Esta regulación abrió la puerta a la investigación médica y a la comercialización de productos bajo estrictas normas de calidad y seguridad.
Los medicamentos en México están regulados por la Ley General de Salud. En el artículo 226, la ley divide a los medicamentos en seis grupos, donde cada uno tiene su reglamentación específica para el suministro.
En noviembre de 2018, la Cofepris dio luz verde a la comercialización de 38 productos derivados del cannabis, disponibles para el público desde enero de 2019, la variedad incluye:
Los productos aprobados por la Cofepris cuentan con estándares de calidad y seguridad, elaborados por empresas nacionales e internacionales. Su etiquetado detalla su uso y beneficios, y están disponibles en puntos de venta autorizados, ofreciendo alternativas terapéuticas respaldadas por la autoridad sanitaria.
Ninguno de estos productos aprobados en México superan 1% de THC ni tienen efectos psicoactivos, e incluso algunos presentan 0%.
A pesar de la legalización del cannabis medicinal y la despenalización del cannabis de uso recreativo en 2021, la comercialización de estos productos sigue en un limbo regulatorio, con incertidumbre sobre su aprobación y disponibilidad en el mercado. Este escenario plantea desafíos y oportunidades para la industria farmacéutica y para los pacientes que buscan acceder a tratamientos innovadores y efectivos.
La falta de regulación para consumo recreativo y productos con un índice de THC más alto detiene las investigaciones del mercado y evitar la importación de una gama más amplia de productos.
El cannabis en la farmacia mexicana representa un campo en evolución, con avances significativos en la regulación y disponibilidad de productos terapéuticos en los últimos años. Como farmacéuticos, es fundamental que nos mantengamos alertas ante los requerimientos de la población y los avances científicos, y así abastecer a nuestros establecimientos de aquello que nuestros pacientes pueden necesitar.
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