El desabasto de medicamentos en México es una problemática que ha afectado a la población durante varios años, a pesar de los esfuerzos gubernamentales por encontrar soluciones. A continuación, exploraremos el estado actual del desabasto y las expectativas para el año 2024.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha reconocido la importancia de garantizar el abastecimiento de medicamentos para todos los ciudadanos. En 2020, se implementó el Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI) para gestionar la adquisición y distribución de medicamentos. Pero, a pesar de los incrementos presupuestarios en salud, los resultados no han sido satisfactorios.
El desabasto de medicamentos tiene consecuencias graves para la población, especialmente para aquellos con enfermedades crónicas. La falta de acceso a tratamientos para afecciones como diabetes, hipertensión y cáncer pone en riesgo la salud y la vida de los pacientes.
Uno de los desafíos clave es la logística y distribución eficiente de los medicamentos en todo el país, incluyendo áreas rurales. Aspectos como las caducidades y las condiciones de almacenamiento también deben ser considerados para abordar eficazmente este problema.
El origen del desabasto está relacionado con una táctica implementada por el presidente López Obrador para erradicar la corrupción en el ámbito de la salud. Al comienzo de su periodo presidencial, se interrumpieron las compras centralizadas de fármacos que llevaba a cabo anualmente el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) desde el año 2013, siendo reemplazado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público. Este traspaso generó retrasos y faltantes de medicamentos en todo el país.
Actualmente, la Auditoría Superior de la Federación identifica la deficiente organización y administración del INSABI como contribuyentes al desabasto. Además, el subejercicio en el gasto en salud en 2022 ha exacerbado la situación.
El gobierno de AMLO ha implementado diversas estrategias para combatir el desabasto, entre ellas la inauguración de la Megafarmacia del Bienestar el 29 de diciembre de 2023 en Huehuetoca. El proyecto implicó una inversión cercana a los 2,700 millones de pesos mexicanos y prometía hacer frente al déficit de medicamentos con un almacén que contendría todos los fármacos necesarios para satisfacer las demandas del país. Además, se comprometió en poder proporcionar los medicamentos en menos de 48 horas a través de un servicio telefónico, incluso a las ubicaciones más remotas del país.
Sin embargo, aproximadamente un mes después de su apertura, solo ha logrado surtir un poco más de 70 recetas médicas en todo el territorio nacional y se prevé que el desabasto de medicamentos persista en 2024.
Aunque el presidente López Obrador destaca algunos avances, la Megafarmacia del Bienestar aún no ha evidenciado ser la respuesta concluyente ante el problema de la escasez de medicamentos en México y el debate sobre su efectividad persiste.