El Ministerio de Salud de la Nación ha dado un paso adelante al reglamentar el DNU 70/23 mediante el Decreto N.º 345/2024 publicado en el Boletín Oficial. A partir del 1.° de julio, las provincias que se adhieran a la nueva reglamentación de receta médica electrónica obligatoria, presenciarán el fin de la vigencia de la orden médica manuscrita.
Esta medida, que abarca la prescripción de medicamentos y las órdenes de estudios y prácticas, representa un impacto directo en la operatividad de las farmacias y la atención médica a los pacientes.
La receta electrónica obligatoria es un sistema que permite la prescripción y dispensación de medicamentos de forma digital. En lugar de utilizar recetas en papel, los médicos podrán emitir recetas electrónicas que pueden ser presentadas por el paciente en el establecimiento farmacéutico o ser enviadas directamente por el profesional a la farmacia. Esto agiliza el proceso de compra de medicamentos y reduce la posibilidad de errores en la prescripción.
Hasta el 1.° de julio, las órdenes médicas en formato papel y digital coexistirán y serán igualmente válidas. No obstante, la nueva normativa enfatiza en la importancia de la receta electrónica para optimizar la trazabilidad del sistema de dispensación de medicamentos y tratamientos médicos. Esto implica un mayor control y seguimiento, desde la identificación del profesional de la salud que prescribe hasta el monitoreo y la adherencia de los pacientes, lo que supone una mejora significativa en la gestión y calidad de la atención sanitaria.
Para garantizar una transición exitosa, se coordinará con las autoridades jurisdiccionales competentes y los organismos con incumbencia en la materia.
El gobierno ha especificado que las actuales implementaciones de receta electrónica y/o digital permanecerán en vigencia mientras cumplan con los requisitos establecidos en la nueva normativa, así como los que puedan establecerse en el futuro por parte de las autoridades competentes, y de acuerdo con el cronograma de implementación acordado.
La nueva normativa implementada por el Ministerio de Salud abarca la unificación y normalización de las plataformas digitales previamente establecidas en el sistema, la creación de un catálogo nacional de fármacos y el monitoreo continuo de la terapia de los pacientes.
Para utilizar la receta electrónica, es necesario contar con los requisitos técnicos adecuados. Esto incluye disponer de un sistema informático que permita la emisión y recepción de recetas electrónicas, así como la conexión a una red segura. Además, es fundamental que los profesionales de la salud reciban la capacitación necesaria para utilizar correctamente el sistema y garantizar la calidad en la prescripción de medicamentos.
“La venta y despacho deben realizarse desde la farmacia, en presencia de un farmacéutico responsable (director técnico y/o farmacéutico auxiliar), su venta y entrega al paciente podrá ser acordada por canales electrónicos determinados por la farmacia, mediante traslado al lugar que este disponga a su conveniencia”, establece el artículo 7° del decreto 345/2024.
La disposición señala que las recetas actuales seguirán siendo válidas siempre que cumplan con los nuevos requisitos establecidos. Esto se debe a que algunos médicos y centros de salud aún no disponen de la capacidad para emitir órdenes electrónicas. Por lo tanto, la normativa establece que la receta en papel continuará siendo válida junto con la versión digital.
Según la disposición, la venta y entrega de medicamentos con recetas electrónicas deben ser realizadas en presencia de un farmacéutico responsable en la farmacia. La entrega al paciente puede acordarse por medios electrónicos definidos por la farmacia, asegurando que el traslado sea seguro y cumpla con los requisitos establecidos por la autoridad sanitaria. En este contexto, el farmacéutico tiene la responsabilidad de garantizar la seguridad del traslado y el cumplimiento de los requisitos aplicables. Asimismo, las farmacias deben archivar y conservar las recetas digitales por un período de 3 años.
Las recetas electrónicas cuentan con medidas de seguridad que garantizan su autenticidad y evitan su falsificación. Además, el sistema registra la identidad del médico que emite la receta, lo que facilita su trazabilidad.
El objetivo de esta implementación, explicó el Gobierno, es "mejorar la calidad en la prestación de servicios de salud a los ciudadanos, a través de la eficiencia y la seguridad, facilitando la identificación de los profesionales que prescriben medicamentos".
Según indicó el gobierno, con esta medida se busca, además de mejorar la calidad del servicio de salud, aumentar la competitividad del mercado, lograr una mayor agilidad de la industria y minimizar costos.
La implementación de la receta electrónica obligatoria a partir del 1° de julio de 2024 en Argentina representa un avance significativo en la digitalización del sistema de salud. Esta medida busca mejorar la calidad en la prestación de servicios de salud, garantizando la eficiencia y la seguridad en la prescripción de medicamentos.
Es fundamental que tanto los profesionales de la salud como las farmacias se preparen adecuadamente para cumplir con los requisitos técnicos y recibir la capacitación necesaria. La receta electrónica obligatoria traerá beneficios tanto para los pacientes como para los profesionales de la salud y las farmacias, mejorando la calidad de la atención y agilizando el proceso de compra de medicamentos.
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