Blog Extendeal

Cuáles son las diferencias clave entre un ERP y un CRM

Escrito por Enric Castillo | Apr 4, 2024 7:58:03 PM

En el sector farmacéutico, es fundamental contar con herramientas eficientes que permitan gestionar de manera efectiva los procesos comerciales y las relaciones con los clientes. Dos de las soluciones más utilizadas en este ámbito son los sistemas ERP y CRM. En este artículo, exploraremos las diferencias entre un ERP y un CRM, así como sus ventajas y desventajas específicas para las farmacias.

¿Qué es un ERP?

Un ERP, por sus siglas en inglés “Enterprise Resource Planning”, es un sistema de gestión empresarial que integra y automatiza los procesos internos de una organización en áreas como finanzas, contabilidad, recursos humanos, inventario, compras, ventas, producción y más. Este tipo de software permite a las empresas tener una visión completa de sus operaciones y facilita la toma de decisiones estratégicas al proporcionar información en tiempo real y centralizada.

Un sistema ERP puede ser una herramienta poderosa para una farmacia, ya que integra y centraliza la gestión de diversas áreas de negocio en un solo sistema. Algunas de las actividades que una farmacia puede realizar con un ERP son las siguientes:

    • Gestión de inventario: Un ERP permite llevar un control detallado del inventario de medicamentos y productos de la farmacia, gestionando las existencias, los movimientos de stock, las fechas de caducidad, las compras a proveedores, entre otros aspectos. Extendeal, por ejemplo, es un sistema para farmacias que les permite conectarse con múltiples distribuidores, comparar precios, encontrar existencias y ejecutar una compra inteligente, ¡en minutos!

    • Gestión financiera: Facilita la administración de las finanzas de la farmacia, incluyendo la facturación, el control de cuentas por cobrar y por pagar, la contabilidad, la generación de informes financieros y el análisis de rentabilidad.

    • Gestión de ventas y clientes: Un ERP puede ayudar a optimizar el proceso de ventas, desde la gestión de pedidos y facturación hasta el seguimiento de ventas, la fidelización de clientes y la generación de informes de ventas para tomar decisiones estratégicas.

    • Control de recetas y medicamentos: Permite gestionar las recetas médicas, verificar la disponibilidad de medicamentos en stock, controlar la dispensación de medicamentos controlados y mantener registros precisos de las transacciones relacionadas con los medicamentos.

    • Gestión de recursos humanos: Facilita la gestión del personal de la farmacia, incluyendo la planificación de turnos, la administración de nóminas, la evaluación del desempeño, la capacitación y el seguimiento de la asistencia.

    • Análisis y reporting: Proporciona herramientas para analizar datos y generar informes detallados sobre diversas áreas de la farmacia, como ventas, inventario, finanzas, clientes, proveedores, entre otros, lo que permite tomar decisiones informadas y mejorar la eficiencia operativa.

 

 

¿Qué es un CRM?

CRM son las siglas de “Customer Relationship Management” en inglés, que traducido al español significa "Gestión de Relaciones con el Cliente”. Un CRM es una herramienta o conjunto de herramientas tecnológicas que permite a las empresas gestionar de manera eficiente las relaciones con sus clientes.

Estos sistemas recopilan, organizan y analizan la información relacionada con los clientes y sus interacciones con la empresa, como historial de compras, preferencias, quejas, consultas, entre otros datos relevantes. El objetivo principal de un CRM es mejorar la satisfacción del cliente, aumentar la retención, identificar oportunidades de venta y mejorar la eficiencia operativa de la empresa en general.

Una farmacia puede beneficiarse enormemente al utilizar un CRM. Algunas de las acciones que podría realizar con él incluyen:

    • Gestión de clientes: Mantener una base de datos actualizada de clientes con información como historial de compras, preferencias de medicamentos, alergias, fechas de recetas, entre otros detalles importantes para ofrecer un servicio personalizado.

    • Recordatorio de recetas: Configurar recordatorios automáticos para alertar a los clientes cuando es hora de renovar sus recetas médicas, garantizando así una continuidad en el tratamiento y fidelizando al cliente.

    • Promociones personalizadas: Utilizar la información de los clientes almacenada en el CRM para crear promociones y ofertas personalizadas según sus necesidades y preferencias, lo que puede aumentar las ventas y la satisfacción del cliente.

    • Seguimiento de campañas de marketing: Registrar y analizar el rendimiento de las campañas de marketing, como promociones por correo electrónico, mensajes de texto, redes sociales, etc., para identificar qué estrategias son más efectivas en la captación de clientes y retención.

    • Servicio al cliente: Facilitar la comunicación con los clientes a través de múltiples canales, como correo electrónico, mensajes de texto, chat en línea, para responder consultas, resolver problemas o proporcionar asesoramiento personalizado sobre medicamentos.

Diferencias entre un ERP y un CRM

La principal diferencia entre un ERP (Enterprise Resource Planning) y un CRM (Customer Relationship Management) radica en su enfoque y objetivo:

ERP: Se centra en la optimización interna de la empresa, integrando y gestionando los procesos de diferentes departamentos como finanzas, producción, inventario, contabilidad y recursos humanos. Su objetivo es mejorar la eficiencia, la productividad y la toma de decisiones estratégicas.

CRM: Se enfoca en la gestión de la relación con los clientes, centralizando la información de clientes potenciales y existentes, sus interacciones, preferencias e historial de compras. Su objetivo es mejorar la atención al cliente, aumentar las ventas y fidelizar a los clientes.

Para resumir:

    • ERP: Optimiza la gestión interna de la empresa.
    • CRM: Optimiza la gestión de la relación con los clientes.

Otras diferencias clave:

Datos que gestionan:

    • ERP: Datos internos como registros financieros, inventario, compras, proveedores y planificación de la producción.
    • CRM: Datos de clientes como información de contacto, historial de compras, preferencias e interacciones.

Funcionalidades:

    • ERP: Contabilidad, gestión de inventario, producción, compras, gestión de proyectos, recursos humanos, análisis de datos, etc.
    • CRM: Gestión de contactos, seguimiento de leads, gestión de ventas, atención al cliente, marketing automation, análisis de datos del cliente, etc.

Usuarios:

    • ERP: Personal de diferentes departamentos como finanzas, producción, inventario, contabilidad y recursos humanos.
    • CRM: Personal de ventas, marketing y atención al cliente.

Implementación:

    • ERP: Implementación compleja y costosa, generalmente requiere la participación de varios departamentos.
    • CRM: Implementación más sencilla y flexible, adaptable a las necesidades específicas de la empresa.

¿Cuál es la mejor opción para una farmacia?

Al elegir entre un ERP y un CRM para una farmacia, es importante tener en cuenta las necesidades y objetivos específicos del negocio. Algunas consideraciones a tener en cuenta son:

    • Procesos: Evaluar los procesos de la farmacia y determinar qué herramienta sería más beneficiosa para optimizarlos
    • Relaciones con los clientes: Considerar la importancia de fortalecer las relaciones con los clientes y determinar qué herramienta proporcionaría las funcionalidades necesarias para lograrlo.
    • Presupuesto y recursos: Evaluar el presupuesto y los recursos disponibles para implementar y mantener la herramienta elegida.

En última instancia, la elección entre un ERP y un CRM dependerá de las necesidades y objetivos específicos de la farmacia. Ambas herramientas pueden ser complementarias y muchas veces se utilizan de manera conjunta para maximizar la eficiencia y el crecimiento del negocio.

Conclusión

Tanto un ERP como un CRM son herramientas valiosas para las empresas. La elección de uno u otro dependerá de las necesidades específicas de cada empresa y sus objetivos. Lo ideal es que ambos sistemas se integren para obtener una visión completa del negocio y optimizar la gestión de los procesos internos y la relación con los clientes.